diumenge, de setembre 25, 2005

LAMENTAMOS LA TARDANZA...

Llevo tiempo sin contar nada. El hecho es que me han dejado tirado como una babosa en conserjería del hotel donde trabajo y me han designado responsable mientras el verdadero (aquél que cobra bastante más que yo) está disfrutando de sincronizadas y de jalapeños en Mexico. El resultado no deja de ser desagradable: menos días de fiesta a la semana, más horas de trabajo al día (hay que dar el pego y hacer unas horitas extra sin remuneración alguna)...
Pero hoy es un día muy tranquilo. Y hete aquí, servidor escribiendo.
La mañana ha empezado ajetreada para todos menos para mí. ¿Quién me iba a decir que a pesar de estar al 100% de ocupación sólo un par de personas se acercarían a mi guarida durante lo que llevamos de mañana?
Kenneth, un pobre merengón frustrado con las peripecias de su equipo, ha agarrado un monumental cabreo ya en los vestuarios por culpa de Pérez Lasa. Está que se sube por las paredes y lo único que hace es escupir barbaridades (pobres blancos...tantas décadas de favores arbitrales y para una vez que parece que favorecen a los blaugrana se ponen celosos y explotan de rabia y cólera).
En recepción no dan abasto con la de gente que se va tan pronto, y en desayunos los camareros van y vienen sudando para rellenar las jarras de zumo y los termos de café.
Y para más inri, tengo en las narices al trío de gospel que despierta a toda la clientela a éso de las 9.30 cada domingo. Aún así, no me quejo, ya que el piano me pone más de los nervios (pero éstos podrían cambiar un poco de repertorio, ya que siempre cantan canciones como la de Hellman's).